Esta noche soñé que me soñabas,
me echabas de menos,
y me lo decías con un susurro
de brisa marina,
te extraño, decías, vuelve,
echo de menos el calor
de tu espalda sobre mí,
me gusta guardarte los pasos de ida,
para que siempre encuentres la vuelta,
vigilante cuando caminas borderline
entre lo firme y el abismo,
añoro tu música que apacigua
mis mareas más salvajes,
y tu olor, tu olor a asfalto,
brea endurecida
por millones de historias urbanitas,
... vuelve.
Así soñé que me soñabas,
pronto estaré contigo,
seré tu ciudad
como tú mi playa.
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