Rosa Veiga Medero

Amanecer, resurrección del día, 
con aromas de sueños,
primavera en el aire y
tristeza escondida.
Penumbras en el horizonte
que atemorizan al tiempo.

Hombres y mujeres,
vanidad de vanidades,
congresos y parlamento
donde se corona la miseria y la muerte.
Templos de las palabras y
leyes, quejas, baúl de las
traiciones,
donde habitan el lobo y las
serpientes.
Noches de luna llena, dolor,
tristeza, sed y descanso,
susurro del amanecer que nos advierte 
que nadie nos llevamos nada,
ni riquezas, risas, ni siquiera
podemos retener al alma.