Miles de balas
han atravesado
el pecho del pájaro.
Pero aún vuela,
vuela no con demasiada esperanza
¡Pero vuela...!
¡Quién sabe!
Algún día, en algún lugar del bosque
quizá aparezca un ser,
un ser inesperado
y llorará, llorará
sinceramente
sobre las heridas...
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