Sollozos y suspiros se adhieren al cristal
crujiente y traslúcido, mudo
de primaveras.
las bombillas
simulando ser flores, en un jardín
de losas.
Es confusa la gloria, las farolas
lo saben
también el hojal blanco y los jazmines negros,
el enigma silvestre y la dudosa arcilla.
No es el portal del sol, quién discute el destino
ni el balcón de la luna quien señala el umbral.
Eres tú amor mío el que marca mis pasos.
Mi corazón latente, luciérnaga prendida.
******************
No hay comentarios:
Publicar un comentario