Javier Solé
Dos extranjeros
en la habitación de un hotel
en una ciudad portuaria del Mediterráneo
no hablan el mismo idioma
pero sus cuerpos delatan
con el movimiento armónico
de sus caderas
que tan solo precisan
el deseo
para encontrarse.
Ilustración de Raymond Leech
Del poemario “El cementerio que habitan los vivos”
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